Junín (Por corresponsal local).- En el Barrio Ricardo Rojas de Junín, provincia de Buenos Aires, una niña de 11 años había desaparecido el domingo 25 de febrero. Al rato de haber desaparecido comenzó a circular el rumor de que había sido vista con el casero de una quinta muy grande de la zona. Una quinta cuya propietaria reclama la tierra de todo el barrio, y que fue un asentamiento en tierras fiscales.Los vecinos fueron a buscar a la fuerza policial más cercana para que ingresara urgentemente a la quinta a rescatar a la niña, pero se trataba de una fuerza policíaca municipal, y les respondieron que no podían ingresar, ni hacer nada. Cabe decir que esta fuerza de tipo municipal fue instalada en un edificio en el que funcionaba la Sociedad de Fomento, desplazando a los vecinos y desde entonces existe un conflicto al respecto. Vecinos y vecinas que cada vez eran más, debieron esperar que llegara la policía provincial, con capacidad de actuar frente a un delito, y esto tomó mucho tiempo. Tal vez, un tiempo clave que podría haber salvado la vida de Camila Borda, de once años, quien fue encontrada en el baño del casero, violada y degollada.
Cuando por fin llegó la policía, vecinos y policía entraron a la quinta, fueron a la casa del casero y en el baño lo encontraron con la niña ya sin vida. La policía arrestó al casero, pero también sacó de la quinta violentamente a los vecinos que querían linchar al asesino y violador. Los vecinos enfurecidos, conmocionados, querían entrar y es entonces donde la policía reprimió a los manifestantes con balas de goma. Una nueva chica herida, ahora por balas de goma de la policía es lo que provoca una pueblada que se dirije a la estación de colectivos, luego al destacamento, y ente otros incidentes genera la quema de patrulleros.Es que los ánimos están caldeados, porque los errores que se vienen cometiendo y "permitiendo" a ricos y poderosos, siempre perjudican a los que menos tienen y el Estado sólo responde con represión.
Ayer lunes, nuevamente se manifestó pero los y las vecinas no pudieron obtener ninguna respuesta. Más de ocho cuadras de marcha llegaron al municipio a exigir justicia.
